La japonesa tetona agarra el nardo del putero con una calidad de puta, succionando su prepucio a la vez que pajea el gallo, notando como se va endureciendo antes de empezar el show. Bien abierta de piernas la puta aguanta cada pollazo como puede, mirandolo con vicio mientras su cono chorrea en cada embestida, culminando con toda la corrida sobre sus tetas.